Percatarse del racismo y la homofobia que ejerció sobre sí misma durante muchos años fue uno de los puntos de partida de Historia de una Reina zapoteca, unipersonal de Reyna Álvarez que el próximo lunes 7 de agosto se presentará en el foro escénico Puro Drama (2 Poniente 2908, Amor), en su primera exhibición en la capital poblana.
Tras una exitosa acogida en Edmonton, ciudad de la costa oeste de Canadá, como parte del Festival Internacional de Teatro de Fringe, la más reciente creación de la artista escénica muxe egresada de la BUAP aborda parte de sus experiencias y de su proceso de autoconocimiento.
“Yo me veía en el espejo y yo me veía una belleza ucraniana, eslava, y quería ser la señora de Las Lomas”, expuso Reyna Álvarez, entre risas, en entrevista con LUMBRERAS: “fue decir o darme cuenta que yo he estado pretendiendo toda mi vida”.
Álvarez decidió hace poco tiempo abrazar libremente su identidad, su origen indígena y su feminidad. Esto último se refleja en la dramaturgia de su montaje, que también tendrá una función especial en el municipio de Tehuacán el 25 de agosto.
Historia de una Reina zapoteca, abundó la artista escénica exintegrante de la Compañía de Teatro del Complejo Cultural Universitario de la BUAP, está contada en clave de comedia y conserva el tono cabaretero que ha caracterizado la última década de su trayectoria.
La protagonista de la puesta trata de huir de sí misma cuando la gente a su alrededor comienza a violentarla porque descubre que es muxe, concepto surgido en las comunidades zapotecas.
Reyna Álvarez relató que la obra también tuvo como detonante el haberse percatado de que el amor no se sujeta únicamente a la relación de una pareja, sino que puede tener otras definiciones.
“Encontré que el amor, el afecto, es un espectro más grande”, detalló la artista escénica a esta revista digital. “Yo creo que eso me ha abierto los ojos: volver a la teoría de qué es el amor romántico me hizo darme cuenta que yo solo quería repetir un esquema”.
La otrora integrante de la compañía Talavera Cabaret explicó que la convivencia con sus sobrinos la hizo descubrir que pueden existir otro tipo de afectos. Sin dar más pormenores de su estreno en Puebla, Reyna subrayó que, más allá de transmitir un discurso respecto a un tema en particular, desea contar una historia de forma sincera.
Aceptarse tal cual es, añadió, conlleva un proceso paulatino y sumamente doloroso que ha logrado sortear gracias a las artes escénicas. En ese sentido, agregó que mediante el cabaret encontró una válvula de escape para dar rienda suelta a su feminidad y defender su esencia.
“Encuentro genuinamente que mi espacio para poder hacer este cruce hacia el otro género y transformarme fue el cabaret”, manifestó en entrevista. “Sí he pretendido mucho. Quiero que este proceso doloroso termine en escena con algo que realmente me pueda avanzar como artista”.
Durante diez años, Reyna Álvarez formó parte de la compañía Talavera Cabaret, mientras que hoy en día está por iniciar una maestría en práctica teatral en Canadá. Justamente, para acceder a este programa de posgrado, la artista escénica tuvo que proponer un tema de investigación innovador, que, en su caso, tiene como hipótesis saber cómo puede repercutir en los estándares de belleza la intersección entre color de piel, orientación sexual y descendencia.
Antes de su estreno en Puebla, la ciudad donde Reyna Álvarez desarrolló previamente su trayectoria teatral, Historia de una Reina zapoteca fue elegida este año en la programación del Festival Internacional de Teatro de Fringe, en el que se presentaron aproximadamente 260 obras en tan solo once días.
La obra tiene una duración de cincuenta minutos y se llevará a cabo el 7 de agosto a las 21 horas. El costo de la entrada por persona es de 200 pesos. Para obtener entradas, puedes consultar las redes sociales de Puro Drama.