La película mexicana Salto a la vida, dirigida por Raúl P. Gámez y protagonizada por Lorena Enríquez, rescata la figura de María Antonieta Osorno Ramírez, “Tony”, una mujer de la vida real que sobresalió en el paracaidismo militar nacional a pesar de que este ámbito fue acaparado por los hombres.
Con un guion escrito por el propio realizador, la trama de la cinta se centra en las adversidades que Tony debió afrontar tras sufrir un accidente que desencadenó una serie de cambios sustanciales para su existencia.
En su arranque, la película estrenada el pasado 15 de septiembre en diversas pantallas del país plantea una reflexión sobre el destino de la protagonista, quien de manera breve revela que tiene dos actas de nacimiento, lo que a su parecer es una reflejo de su contexto, porque tuvo que “nacer dos veces”.
“Yo, aparte de ser actriz de la película, soy productora también”, explica la protagonista, Lorena Enríquez, en entrevista con LUMBRERAS. “Esta película llegó a mí por un libro que escribió María Antonieta Osorno Ramírez que se llama Salto de amor por la vida. Yo leí el libro y me encantó su historia, me encantó su vida, se me hizo una historia que todo México debería de conocer”.
A decir de la intérprete, quien ha aparecido en una nutrida cantidad de series y telenovelas mexicanas, Salto a la vida es una propuesta que muestra otro rostro del territorio nacional, no recurre a escenas de violencia o sexo y no utiliza lenguaje soez.
El mayor reto de personificar a Tony fue justamente saber que se trata de un ser real vivo, “una mujer ejemplar que es una heroína mexicana”. El filme, añadió la actriz y productora, también servirá para dar a conocer la labor de los integrantes de las fuerzas armadas nacionales.
“Es una película digna para todos los mexicanos”, ahondó, “porque nos merecemos este tipo de cine. Yo creo que ya estamos un poco cansados de las demás historias, de los malos, de los villanos. Entonces, tener de repente otro tipo de héroes mexicanos nos llena el corazón”.
Lorena Enríquez consideró que Salto a la vida se inscribe en el género del drama motivacional y es una obra apta para toda la familia que contribuye a que las y los niños revaloren, desde temprana edad, la labor de los soldados mexicanos.
En el elenco también se encuentra Andrés Puentes Jr., quien personifica al esposo de Tony, un instructor de paracaidismo. Su rol, aseguró el actor, no es un antagonista, pues posee distintos matices.
En este sentido, Enríquez coincidió en que no las personas no pueden ser enmarcadas en solo dos tonalidades, blanco o negro, ya que todos los seres humanos han hecho cosas buenas y malas. La actriz retomó las palabras del realizador, quien dijo que el verdadero antagonista de la historia es el accidente sufrido por Tony, porque este marcó su vida.
Por lo que respecta a las locaciones de la película, Puentes Jr. apuntó que la mayoría corresponde a instalaciones de las fuerzas armadas, entre ellas la base aérea mexicana, el heroico colegio militar o Santa Lucía.
El actor aseguró algunos lugares mostrados en Salto a la vida nunca habían sido visitados por civiles, lo que hace de Salto a la vida una producción única.
Entre las principales virtudes de la cinta destaca el compromiso de Lorena Enríquez por representar a Tony tanto en sus momentos de mayor luminosidad como en aquellos donde su ser es dominado por el hartazgo y la ira.
Igualmente, el filme rescata el talento de Pedro Romo, que en los años noventa gozó de una fama momentánea por su participación en la saga cinematográfica de La risa en vacaciones.
También resaltan algunas tomas o secuencias de los saltos en paracaídas, junto con las buenas intenciones de los productores por visibilizar la historia de una mujer perseverante.
En contraste, por momentos la producción pasa a ser un infomercial de la fuerza aérea mexicana, con una fotografía irregular y un forzado emplazamiento de marcas comerciales.