Exponen archivos de la primera colectiva de arte feminista en México

El Museo Amparo abrió este sábado una exposición de archivo sobre “Polvo de gallina negra”, la primera colectiva de arte en México que se enunció abiertamente feminista.

El grupo integrado por Mónica Mayer y Maris Bustamante, pioneras del arte feminista contemporáneo en América Latina, enfocaron su trabajo en el performance, por lo que la exposición “Polvo de gallina negra: mal de ojo y otras recetas feministas” se integra de fotografías, videos, material de archivo y hemerográfico, bocetos, carteles y dibujos que dan cuenta de la labor que produjeron las artistas desde los años setenta y en el breve tiempo que estuvieron en activo como grupo artístico.

La exposición de archivo en el Museo Amparo. Foto: Josué Cantorán

La exposición fue organizada por el Centro Nacional de Arte Contemporáneo de Chile en colaboración con el apoyo de la cátedra extraordinaria Rosario Castellanos de Arte y Género de la Universidad Nacional Autónoma de México. La curaduría corrió a cargo de Julia Antivilo Peña y María Laura Rosa.

Se exponen cartas y archivos hemerográficos. Foto: Josué Cantorán

De acuerdo con un boletín informativo del Museo Amparo, “Polvo de gallina negra” se formó “con el objetivo de impugnar la imagen tradicional de las mujeres, cuestionar su rol, denunciar la violencia ejercida contra ellas, y criticar el machismo imperante en México y en América Latina”.

Se exploran los vínculos con el artivismo de la colectiva. Foto: Josué Cantorán

La exposición, disponible en las salas temporales del Museo Amparo, explora la relación de la colectiva con el artivismo feminista y su legado en artistas de épocas posteriores que vieron en “Polvo de gallina negra” la inspiración para producir material artístico que abordara temas  y perspectivas feministas.

Esta colectiva experimentó en el performance. Foto: Josué Cantorán

Una de las piezas esenciales de esta colectiva fue “El tendedero” (1978), un performance cuyas características permiten ser reactivado múltiples veces en diversos espacios. En esta, las artistas piden a mujeres que escriban en papeles situaciones de violencia que han tenido que afrontar, lo que permite reflexionar sobre las violencias machistas de la experiencia cotidiana. Estos papeles son pegados en pequeños tendederos.

Registros de las principales acciones de “Polvo de gallina negra”. Foto: Josué Cantorán

También se presentarán acciones relativas al proyecto “¡Madres!” (1987), entre las que se encuentra la disposición de delantales con abdomen de embarazada, o el concurso “Cartas a las madres”, que en su primera versión recibió casi 70 cartas provenientes de todo México de hijos e hijas que le escribían a sus madres lo que nunca se habían atrevido a decirles.

El tendedero. Foto: Josué Cantorán

Los documentos que presenta la exposición provienen de archivos de instituciones mexicanas y argentinas, como Arkheia, del Museo Universitario Arte Contemporáneo de la UNAM, la biblioteca Xavier Clavigero de la Universidad Iberoamericana, ambos en México, y waldengallery en Buenos Aires, así como de los archivos personales de las artistas Maris Bustamante y Mónica Mayer.

Las curadoras de la exposición. Foto: Josué Cantorán

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