Óscar Ramírez traza siluetas de la modernidad

En la exposición “Delirios en el espejo interior”, disponible en el centro cultural Casa Olinka (18 Sur 5937, Jardines de San Manuel), el artista emergente Óscar Ramírez presenta una serie de dibujos y fotografías que se centran en el erotismo de la diversidad y deseos carnales de la actualidad, retratos de nuestra época cuyas miradas, gestos y detalles muestran el carácter moral de su creador.

La inspiración para la creación de estos dibujos, confió Óscar Ramírez en entrevista con LUMBRERAS, es “la ruptura”, es decir, “explorar los temas de la sexualidad, del género de hoy en día”. La obra de este artista abre la mente del espectador en medio del torbellino de las distracciones digitales y logra un enfoque fascinante y sensual hacia las imágenes.

“El objetivo es atraer la atención a este siglo, pero con estos nuevos enfoques”, explica el artista emergente en entrevista, “aprovechando un poco el momento actual de la diversidad, en que ya se borran un poco las líneas entre masculino y femenino. Entonces, creo que hay una correspondencia entre el arte del presente con el movimiento actual de la sociedad. Busco un poco retratar esa diversidad, ya más revuelta entre todo”.

Los dibujos monocromáticos de Óscar Ramírez resaltan siluetas humanas alargadas, andróginas, rostros, gestos, sonrisas y miradas profundas, con auras de misterio y sensualidad. Estos detalles llaman la atención del espectador hacia estas construcciones pictóricas, que revelan experiencias urbanas, un mundo entero, para descifrar su narrativa enigmática.

“Creo que, en ese terreno”, continúa el artista en entrevista, “se gana más expresividad para lo que yo quiero transmitir, que es una especie de elegancia, tenebrosa, seductora a la vez, así como un juego de timidez pero con mucha presencia: figuras muy tímidas pero que expresan mucho con su simple presencia”.

La pieza central de la exposición de Óscar Ramírez. Foto: Margot C. Vallina

De las más de veinte piezas que se muestran en “Delirios en el espejo interior”, destaca una por el detalle meticuloso de su composición. Se trata de la representación de un edificio en el que se puede observar la coexistencia de distintas realidades, de elementos unitarios de la sociedad, como las vestimentas, decoración de espacios, contextos en diferentes mundos.

“Me entusiasma fantasear con la simultaneidad de lo que pasa porque es real”, explicó Óscar Ramírez en entrevista. “Finalmente, en un edificio están pasando cosas dentro de las casas, y la riqueza en cada uno de los interiores nos hace preguntarnos qué estará haciendo el vecino, el de arriba, el de al lado, el de abajo, o sea, ¿qué está sucediendo ahí? Son historias tristes, historias de éxito, y que todo eso pase al mismo tiempo me parece muy interesante. Es una riqueza increíble de tanto que hay: tantos gestos, palabras, sufrimientos, alegrías, recuerdos. Quise demostrarlo todo al mismo tiempo, porque lo que hay alrededor no se pausa, o sea, sigue sucediendo”.

Uno de los elementos que refuerza estas ideas de misterio y seducción sombría es la iluminación de la sala en la que está montada la exposición: con una luz roja, se construye una atmósfera que acentúa la experiencia de observar lo extraño pero fascinante de los dibujos hechos a lápiz. La intención de esto, de acuerdo con Óscar Ramírez, es vivir una experiencia que podría ser insólita y “cabaretesca”.

“La intención de la luz roja es presentar los dibujos para verlos de otra forma”, dice al respecto. “Para algunas personas es como estar dentro de mi cabeza, y creo que va por ahí. Finalmente, es como yo podría ver las cosas. El rojo finalmente es un color muy seductor, profundo, un poco agresivo, que tiene que ver con ciertos valores que intento plasmar en mi trabajo”.

La exposición no contiene solo dibujo, sino otras exploraciones plásticas. Foto: Alejandro Jiménez

Además de dibujos, la exposición también presenta fotografías en blanco y negro, así como títeres que forman parte de la obra de teatro para adultos Icnocuicatl, en la que el artista participó como productor plástico y que se presenta en el foro El Breve Espacio.

La exposición “Delirios en el espejo interior” está abierta al público hasta el 14 de junio y de forma gratuita en el centro cultural Casa Olinka (18 Sur 5937, Jardines de San Manuel).

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *