Llevarán espectáculo sensorial al corral de comedias de Tecali

La compañía de teatro experimental Sensorama ofrecerá este fin de semana seis funciones del espectáculo Cuatro rumbos: mestizaje entre la tierra y el cuerpo en el teatro Gregorio de Dante (25 de Agosto Sur 111, Tecali de Herrera), también conocido como el antiguo corral de comedias de este municipio, ubicado a unos cincuenta minutos de la capital poblana.

Los asistentes a este espectáculo de teatro sensorial ingresarán al teatro con los ojos vendados por un antifaz y recibirán una serie de estímulos sonoros —como música, sonidos guturales y narraciones orales—, olfativos, gustativos y táctiles a partir de una narración dividida en cuatro actos que corresponden a los cuatro puntos cardinales.

“Todo este proyecto”, explica en entrevista la artista escénica Tania Galindo, una de las integrantes del elenco, “tiene que ver con esa forma de sentir y experimentar el mundo y relacionarnos a partir de una forma mucho más sensible. Casi siempre, si tú cierras los ojos, te sientes más vulnerable y estás más abierta o abierto a poder sentir o percibir a través de otra forma”.

La también integrante de Sensorama añadió que el espectáculo a presentarse en Tecali de Herrera utiliza la mayoría de los recursos que la compañía ha ido desarrollando a lo largo de sus 25 años de trabajo, por lo que lo llama “el ABC de Sensorama”.

“Este teatro sensorial busca que vayamos a la dimensión de lo sensible, de la escucha”, dice la artista al respecto. “Este espectáculo que preparamos fue como el ABC del Sensorama. En todo este trabajo de dimensión sensorial, hay muchos experimentos”.

Cuatro rumbos, dirigido por Demián Lerma y promovido por la compañía Sensorama con apoyo de artistas locales y de integrantes de la comunidad de Tecali, busca, entre otras cosas, hacer conciencia en el espectador de todas las sensaciones que suelen pasar desapercibidas cuando la mayoría de los estímulos ingresan a la conciencia por la vista.

A decir de Tania Galindo, al permanecer con los ojos vendados y recibir toda clase de estímulos sensoriales, el espectador puede ingresar en un estado mental distinto que favorece la introspección y la autoconciencia.

“Ahora que tenemos una relación muy fuerte con los celulares, las pantallas”, ahonda al respecto la artista, “estamos en un momento en que la dimensión de lo visual ha sido la forma en la que nos conectamos con el mundo. Olvidamos que nuestra piel es el órgano más grande que tenemos. Olvidamos que tenemos un corazón, que está latiendo antes de que naciéramos. Olvidamos que la relación más profunda que podemos tener con otro ser humano o con un animal, o con cualquier cosa, es a través de una relación directa”.

Por otro lado, al ser un espectáculo creado ex professo para la comunidad de Tecali de Herrera, Sensorama tomó en cuenta algunos de los aspectos históricos de este punto geográfico para incluir elementos regionales a la pieza escénica. Por ello, el mestizaje se volvió un punto conceptual central de Cuatro rumbos.

“Tecali de Herrera es un lugar, un punto muy específico”, explica Tania Galindo en entrevista, “donde se ha creado el mestizaje, no solamente entre los españoles y los indígenas, sino también fue un lugar donde los chichimecas, los popolocas, los mixtecos y varias culturas se reunieron antes de que llegaran los españoles”.

De este modo, algunos de los elementos que el espectador podrá oler, sentir y degustar en el espectáculo sensorial son originarios de la región. Las integrantes del elenco de Cuatro rumbos son Diana Tlazolatzintli, Belén Meza, Xiucóatl, Lupix Zen, Erika Pirl, Marcelo Cerón, Demian Lerma y Tania Amaru.

Los cuatro rumbos

La estructura de Cuatro rumbos está dividida en cuatro actos que corresponden a los puntos cardinales. En cada uno de ellos se cuenta una breve narración oral que va acompañada de sonidos, olores, sabores, texturas y movimientos guiados por las integrantes del elenco con cada uno de los espectadores.

“Cada rumbo tiene un color, un aroma, un sabor, una cualidad energética”, explica Tania Galindo. “Cada uno está vinculado con una forma de la naturaleza: el Oriente con el sol, el Poniente con la semilla, con todo lo que crece, con el viento, con la creatividad; el Norte con los ancestros; el Sur con el agua, con la medicina, y en el centro está el corazón de todos nosotros y el corazón de la tierra”.

Al finalizar la función, cuando los espectadores retiren la venda de sus ojos y observen el lugar donde se encuentran, habrán podido entrar en contacto directo con sus sensaciones y, quizá, se habrán reencontrado con recuerdos activados por los aromas, sensaciones corporales olvidadas en el trajín de los días y hasta mundos paralelos a los que solo se puede acceder a través de los sentidos.

“Cuando cierras los ojos más de diez minutos”, dice Tania Galindo, “tu cuerpo empieza a entrar a un modo como de dormir, se empieza a relacionar con esa otra dimensión, que es la dimensión de lo sensible. Entonces, empezamos a escuchar nuestro corazón, nuestros órganos, empezamos a sentir incluso el latido, la sangre. La dimensión de la piel es impresionante”.

El espectáculo sensorial Cuatro rumbos: mestizaje entre la tierra y el cuerpo tendrá seis funciones el sábado 15 y domingo 16 de julio a las 12, 14 y 16 horas en el teatro Gregorio de Gante de Tecali de Herrera. Para mayores informes, puedes consultar las redes sociales de Sensorama.